La montanera pasada fue una de las mejores para el Ibérico en los últimos años

La escasez de lluvias complica la montanera

También la falta de hierba por esa ausencia de agua hace que la montanera se desarrolle en unas condiciones menos favorables

El sector del cerdo Ibérico mueve cada año un importante volumen de negocio en la comarca de Los Pedroches, referente a nivel nacional e internacional por la calidad de sus productos. El jamón Ibérico de bellota sigue siendo el reclamo por excelencia y de ahí que año tras año ganaderos, productores e industriales estén muy pendientes de las condiciones climatológicas para llevar a cabo una montanera que permita dar continuidad a la calidad del producto, según publica ABC.

La presencia de bellota es vital para el buen desarrollo de la fase final de la cría del cerdo donde se produce el engorde tradicional fundamentalmente a través de ese fruto. Ya en el inicio de la montanera, allá por el mes de octubre, el sector se mostraba optimista ante la presencia de bellota que eso sí necesitaba de la lluvia para madurar correctamente. La presencia de precipitaciones en las últimas semanas ha permitido recuperar algo, pero la sensación general es que esas lluvias han llegado demasiado tarde.

«Estamos ante una montanera complicada porque es muy seca, se ha perdido mucha bellota que estaba cuajada y por falta de agua no ha llegado a madurar», explica Rafael Muñoz, ganadero de la comarca de Los Pedroches. A esta situación hay que unir otro factor determinante para Muñoz, la falta de hierba por esa ausencia de agua lo que complica aún más el desarrollo en condiciones favorables de la montanera. «Las lluvias han llegado tarde, se ha podido remediar algo pero han llegado tarde y se ha perdido bastante», sentencia este joven ganadero.

Todo esto tiene lógicamente una extensión en la producción de jamones y nos situamos ante una añada con jamones de menor calidad derivados de un animal también de menor calidad al haber comido menos bellotas y no tener una cantidad de hierba óptima. Sin embargo y a pesar de que las condiciones no han sido las que el sector hubiera deseado, no estamos ante la peor montanera de los últimos años y no hay que irse muy lejos para observar una peor.

Para lo que sí han valido las últimas lluvias registradas es para remediar la presencia de pastos.

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