El Catálogo Oficial de Razas de Ganado de España incluye a la variedad Retinta del Cerdo Ibérico en el Grupo de Razas Autóctonas de Fomento.
CARACTERÍSTICAS GENERALES
El rasgo distintivo de esta variedad es la tonalidad retinta uniforme de la capa, aunque pueden existir variaciones en color que van del rojo oscuro al casi rubio. Presenta pelos uniformemente distribuidos por el cuerpo, en general de esqueleto fino y ligero. Como variedad más representativa de la población actual de cerdos ibéricos, son los ejemplares con las características más acordes con el prototipo racial estándar: animales de tamaño medio, ligeros, vivos y de movimientos fáciles, de piel siempre pigmentada y pelo débil no muy abundante.
La cara no es ancha y el hocico fuerte y alargado, con orejas dirigidas hacia delante y abajo. Las extremidades son finas pero resistentes. Algunos Ejemplares pueden portar mamellas.
DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA
La variedad retinta del cerdo Ibérico se extendía, tradicionalmente y de una manera general, por todo el sudoeste de España, desde el sur de Zamora hasta las provincias andaluzas de Cádiz y Málaga, llegando por el centro a Toledo y Ciudad Real. Actualmente esta presencia va más allá de la zona tradicional de producción, estando representado en prácticamente el resto de CCAA del país.
CARACTERÍSTICAS PRODUCTIVAS Y SISTEMA DE EXPLOTACIÓN
La Raza Porcina Ibérica se explota mediante sistemas extensivos, semiextensivos e intensivos. El cerdo Ibérico en extensivo va haciéndose con el paso del tiempo y en libertad. Se alimenta en pastoreo, ejercitando su musculatura, ligado al desarrollo y conservación de la dehesa.
El sistema semiextensivo acelera la producción en niveles variables respecto al sistema tradicional, utilizando para ello alimentación con concentrados y un mayor grado de confinamiento de los animales, aunque siempre cuenta con una base territorial y bastante superficie de dehesa que permite, en muchos casos, hacer cerdos de recebo de calidades muy apreciables.
El sistema intensivo es el modelo que cada vez más utiliza instalaciones y procesos similares a los que se aplican al cerdo blanco, si bien en algunas regiones tradicionales como Extremadura, Andalucía o Castilla y León, todavía se establece este tipo de explotaciones con base territorial, de modo que, en alguna de sus fases de producción, los lechones, marranos, primales o reproductores hacen ejercicio en parques o incluso en territorios de mayor extensión, aunque se alimentan a base de concentrados.
*Expresamos nuestro agradecimiento por su colaboración al Ministerio de Agricultura, a las Comunidades Autónomas del Estado Español, a las Organizaciones de Criadores de Raza Pura, oficialmente reconocidas por el Ministerio y por las CCAA, a los Profesionales de la Ganadería, a las Universidades y a los Centros de Investigación, Selección y Reproducción.