Catalogada en tiempos pasados como de triple propósito: carne, leche y lana, en la actualidad se cría para la producción de carne como objetivo principal, y casi único, obteniéndose un cordero pascual criado a hierba, que sale a pastar con la madre y es sacrificado a los 4-5 meses de edad con un peso de 28-30 Kg. Asimismo, es destacable en la raza su elevada prolificidad, situada en torno al 194%, y la alta precocidad sexual, que la sitúan en los primeros puestos en España, dado que realizan el primer parto a la edad de 11-12 meses, que se corresponde con cubriciones a los 6-7 meses de edad.
Las ovejas viven todo el año en el campo, siempre en cercas, generalmente de piedra, de reducido tamaño, dada la fuerte división de la propiedad de la tierra en esta isla.