La oveja Latxa sale a pastar prácticamente todos los días del año en las zonas más templadas. Es habitual la trashumancia corta o trasterminancia (valle-montaña), en la cual, el rebaño permanece en zonas bajas mientras se encuentra en producción, para luego subir a los pastos de montaña en los meses cálidos del año.
Ejerce una función ecológica muy importante aprovechando recursos forrajeros que de otra manera se perderían y, por lo tanto, realiza limpieza en los montes. Su alimentación se apoya principalmente en el pastoreo, ahora bien, en épocas de mayores necesidades se complementa con forrajes y concentrados.
Tiene carácter lechero indiscutible. Se ordeña entre cinco y seis meses.