La cabra Negra Serrana dispone de excelente aptitud para la producción de carne en zonas de medio difícil, dada su perfecta adaptación al duro medio en que se explota, su gran formato corporal, el alto peso al nacimiento de los cabritos, el elevado ritmo de crecimiento y las buenas características de la canal. Es por ello que, el objetivo principal de su explotación es la citada producción, que se apoya en los tres tipos comerciales de carnicería siguientes: “cabrito de leche”, “chivo” y “caprino mayor”. En la actualidad, se está orientando la producción de carne hacia el “cabrito lechal”, animal alimentado principalmente con la leche de la madre, sacrificado a los 35-45 días de edad, con un peso vivo entre 8 y 10 kg.