El nombre de la raza procede e indica ganado de la tierra, local. En este caso, el ganado propio de las provincias de Álava, Vizcaya y Guipúzcoa, con emplazamientos muy localizados dentro de ellas.
Los ancestros de esta raza pueden identificarse con el Tronco Ibérico, y dentro de éste con la rama derivada del Bos Taurus Ibéricus ancestral. La historia de la raza es la misma que la de otras razas autóctonas de preferente utilidad como animal de trabajo y complementariedad para carne, que, abandonando la primera, sufre extraordinaria pérdida de efectivos hasta que encuentra condiciones para adaptarse y sobrevivir como productora de carne.
El Catálogo Oficial de Razas de Ganado incluye a la raza bovina Terreña en el listado de razas autóctonas amenazadas.