La raza Negra Andaluza celebra su X Concurso Nacional en la Feria de Pozoblanco

El jurado calificador, compuesto por José Ramón Villegas, Alfonso Díaz y Joaquín Doctor, otorgó el premio de Mejor Ganadería a Prado Fal e Hijos

El pasado 22 de abril, en el marco de la Feria Agroganadera del Valle de los Pedroches, la Asociación de Criadores de la Raza Negra Andaluza celebró la X edición de su Concurso Nacional.

El jurado calificador, compuesto por José Ramón Villegas, Alfonso Díaz y Joaquín Doctor, otorgó el premio de Mejor Ganadería a Prado Fal e Hijos, explotación que también se alzó con los galardones de Mejor Macho y Mejor Hembra.

SOBRE LA RAZA

La región geográfica que ocupa dentro del territorio nacional y el color de su capa justifican su designación de Raza Negra Andaluza. También recibe los nombres de Negra Campiñesa o Negra de las Campiñas.

Derivada del Tronco Ibérico, llega a la Campiña Andaluza como excelente animal de trabajo para las labores agrícolas, superando a las demás razas locales por su rusticidad, capacidad dinamógena y fortaleza.

El Catálogo Oficial de Razas de Ganado incluye a la raza bovina Negra Andaluza en el Grupo de Razas Autóctonas en Peligro de Extinción.

Morfológicamente la raza agrupa animales de perfil recto con abundante variación hacia el convexo, proporciones medias, con tendencia a la hipermetría, poca masa y mucho hueso. Capa negra zaina. Se trata, además, de sujetos muy equilibrados, rústicos y sobrios. Temperamentalmente son de carácter tranquilo y dócil, lo que les hace ser muy apreciados en medios donde los bovinos locales destacan por todo lo contrario.

El peso vivo de los machos adultos oscila entre los 875 y los 950 Kg., y el de las hembras entre los 600 y 650 Kg. La alzada a la cruz es de 140 cm. de media en los machos y de 135 cm. en las hembras. La hipermetría desborda con frecuencia las cifras anteriores.

La raza, se encuentra dispersa en dos núcleos dentro de Andalucía. Por un lado, en las zonas de Sierra Morena coincidentes con las estribaciones de las provincias de Córdoba y Huelva. Por otro, en las tierras bajas de las provincias de Sevilla, Cádiz y Huelva.

La raza Negra Andaluza está orientada a la producción de carne, bien en pureza o cruzada, dando terneros de excelente conformación y rendimiento. Se estima que el 30% de las reproductoras se cubren en pureza, las cuales manifiestan su primer celo entre los 18 y 20 meses de edad, en función de su desarrollo y estado nutricional. La cubrición se hace en libertad, prestando una magnífica aptitud para la reproducción. Alcanza un 80% de fecundidad y un 95% de fertilidad, siendo el porcentaje de partos gemelares del 1,15%. Los terneros nacen en pleno campo, criándose vigorosos gracias al acusado instinto maternal, separándose de la madre sobre los 6 ó 7 meses de edad con un peso vivo que oscila entre los 190 y 220 kilos.

Como todas las razas de explotación extensiva, la Negra Andaluza se mantiene con los recursos que el medio le proporciona, apoyada con alimentación complementaria cuando aquellos son insuficientes. En cuanto a infraestructura, las fincas no están mejoradas, limitándose, en la mayoría de los casos, al vallado, una mangada rudimentaria y comederos esparcidos por el terreno. Su sobriedad, capacidad de adaptación a las adversidades climatológicas y condiciones maternales, le condicionan una buena disposición para la producción cárnica.