Fermín Bohórquez: «Alianza Rural tiene un objetivo fundamental, que es acercar el campo a la ciudad»

Tras su reciente nombramiento como presidente de Alianza Rural, hablamos con Fermín Bohórquez para conocer su visión acerca del sector agrario

Tras su reciente nombramiento como presidente de Alianza Rural, la Federación Española de Asociaciones de Ganado Selecto (FEAGAS) ha entrevistado a Fermín Bohórquez para conocer su visión acerca del sector agrario.

  • ¿Qué es Alianza Rural y cuáles son sus principales objetivos?

Esta entidad surge de la unión de las asociaciones más representativas del campo español, estructuradas en torno a la agricultura, ganadería, caza, forestal y mujer rural: Asaja, Real Federación de Asociaciones de Ganado Selecto (FEAGAS), Unión de Criadores de Toros de Lidia (UCTL), Real Federación Española de Caza, Fundación Artemisan, Aproca y Mujer Rural para dignificar a nuestra gente del campo, para volver a conectar el mundo rural y el ámbito urbano, y como no podía ser de otra forma, para que las empresas -como sector de negocios- vuelva a mirar al campo desde un punto de vista empresarial.

  • ¿Cuál es la importancia de esta entidad en la actualidad?

Alianza Rural tiene un objetivo fundamental, que es acercar el campo a la ciudad, y de esa forma, conectar el mundo rural y urbano. En España hay 17 comunidades autónomas, pero existe una frontera entre el mundo urbano y la realidad rural que debemos traspasar para conectar ambas realidades.

AR ha venido a acercar ambos mundos y a hacer comprensibles los problemas del campo.

  • ¿Qué novedades aporta Alianza Rural respecto a otras entidades similares del ámbito del campo?

Alianza Rural supone una entidad paraguas de representación para todo el sector rural que no viene a interferir en los asuntos propios de las entidades que la componen. Trabaja en conceptos amplios y trasversales para cada una de ellas, por eso AR es un reto para el mundo del campo que siempre ha estado silenciado y dedicado a su labor diaria, pero se presenta como una herramienta necesaria para la sociedad en un momento donde comunicación, marketing, empresa responsable, negocio y el campo… deben ir de la mano.

Por eso me he involucrado desde el primer momento en Alianza Rural, y ahora me enorgullece especialmente poder ser presidente y desarrollar junto con un equipo multidisciplinar y enamorado del campo acciones que repercutan positivamente en el mismo.

  • ¿Cómo valora su nombramiento como presidente?

Yo me siento orgulloso de España, de nuestro campo, de nuestro sector agrario y de nuestras tradiciones. Y quiero trabajar para que la sociedad nos conozca y descubra las bondades de nuestros productos, se sientan orgullosos de ellos y que respeten nuestra cultura rural y nuestros usos y costumbres.

  • ¿Qué líneas de actuación van a seguirse durante su presidencia?

Fundamentalmente dos: acercar el campo a la ciudad y enseñar el campo en las aulas. Creo que son dos grandes retos en los que debemos trabajar.

Además, tenemos un convenio firmado con la Federación Española de Cocineros y Reposteros (FACYRE), con quienes estamos trabajando de la mano para la puesta en valor de todos nuestros productos. Es decir, aplicamos de forma directa la estrategia europea ‘Del Campo a la mesa’.

  • Usted es rejoneador y ganadero. ¿Desde cuándo lleva ligado a este sector?

Toda mi vida. Siempre digo que llevo el campo en las venas, y así lo siento. Vivo en el campo y aunque mi faceta más pública ha sido el rejoneo, soy ganadero, agricultor y cazador…pero por encima de todo, enamorado del campo.

  • Desde su punto de vista, ¿cuáles son los principales problemas del campo?

Los problemas del campo al margen de las consideraciones sectoriales pueden simplificarse en uno: el profundo desconocimiento social, lo que conlleva desconocimiento y alejamiento político.

España es eminentemente agrícola, somos la despensa de Europa y sin duda, una de las mejores del mundo, y nuestra sociedad desconoce de dónde vienen los alimentos y el valor y esfuerzo de quienes los producen. Aunque hablamos de cuidar el planeta, me da la sensación de que tampoco somos conscientes de la importancia de la conservación de nuestros montes, de nuestras dehesas, de todos los espacios naturales que se mantienen por la labor silenciosa de muchos ganaderos de razas autóctonas y adaptadas al medio durante siglos.

  • ¿Hay una desconexión del medio rural y la ciudad? ¿Por qué?

No creo que obedezca a un único motivo, pero sí un cambio de paradigma social que se traduce en una falta de dignificación de nuestra gente del campo. La sociedad considera que para progresar debes ir a la ciudad pues no se han potenciado las oportunidades que ofrece el ámbito rural. Ha tenido que llegar una pandemia mundial para darnos cuenta de lo bien que se puede vivir en el campo y para que las empresas flexibilicen el teletrabajo.

  • Otro de los aspectos que está teniendo mayor impacto en lo que conocemos como “España vaciada” es la despoblación. ¿Qué se puede hacer para que estos pueblos sean atractivos para los jóvenes?

Oportunidades de negocio, rentabilidad de las producciones agropecuarias, atractivos fiscales, facilidades de teletrabajo, mejoras en la conectividad… El campo ofrece una calidad de vida y una compatibilidad familiar y laboral perfecta.

  • La pandemia ha propiciado que se mire más a lo rural. ¿Considera positivo este cambio de tendencia?

Como decía antes, si hay algo positivo, si es que lo puede haber de una pandemia mundial, es un cambio de paradigma social respecto a lo rural.

Los meses de confinamiento fueron muy duros para todo el mundo, pero, especialmente para quienes lo vivieron encerrados en pisos en las ciudades o con el miedo de transmisión del virus en una ciudad. Afortunadamente, en el campo la sensación era distinta.

Y debemos continuar agradeciendo a quienes no dejaron ni un día de alimentar a los animales o de cultivar… para que no nos faltase alimento en los lineales de los supermercados.